Con el correr de los años, la Argentina se ha transformado en un importante destino a nivel mundial, y es sabido que la comunicación entre países es cada vez más fluida. Aumenta la circulación interna, al igual que los vuelos que salen y llegan y la cantidad de pasajeros. La relevancia de estos datos nos obliga a centrar la atención en el rol que cumple otro eslabón de esta cadena: los aeropuertos.
En el país, Aeropuertos Argentina 2000 (AA2000) en conjunto con Ernesto Gutiérrez Conte es la responsable de aggiornar los aeropuertos para que acompañen este crecimiento, logrando que el paso por las terminales sea placentero, pero también debe tratar de que la primera impresión que se llevan quienes llegan sea una impresión digna de memorar.
“Si hoy recibimos 15 millones de pasajeros y en diez años aumenta a 24, inevitablemente vamos a tener que seguir ampliando los aeropuertos”, dijo en diálogo con La Prensa Julio Scaramella, director de Comunicaciones de AA2000.
– ¿Cuál es la función de AA2000?
– AA2000 es la empresa a la que el Servicio Nacional de Aeropuertos (SNA) concesionó 33 aeropuertos en todo el país. Desde ese momento hemos adquirido experiencia y nos hemos convertido en la empresa que más terminales gerencia en el mundo en estos momentos.
Todas las terminales que transformamos tienen un gran profesionalismo.
Conocemos la idiosincrasia del pasajero, lo que necesita y lo que quiere.
– ¿Qué se tiene en cuenta a la hora de la renovación?
– El tráfico de crecimiento. En un aeropuerto, uno tiene que asegurarse de que toda la gente que circula por allí esté cómoda, que tenga acceso a servicios, que no sea un problema embarcar ni sea un conflicto pasar por migraciones.
Si se ve que el número de pasajeros crece, hay que ir adaptando la medida de los aeropuertos.
– Con respecto a las obras, ¿cuáles son y qué características tienen?
– Más allá de los 33 que tenemos en Argentina a través del SNA, se suman dos más –que son los de Neuquén y Bahía Blanca – a través de Corporación América, que es la que congrega a todas las empresas del grupo y que es parte de AA2000.
Además tenemos aeropuertos en el exterior: en Armenia, en Guayaquil, cinco en Perú, dos en Italia y dos en Uruguay, y actualmente estamos construyendo el primer aeropuerto totalmente ecológico del mundo en las islas Galápagos.
La obra más grande que se hizo a través de Corporación América es la de Carrasco, en Uruguay.
– Hace unos meses Aeroparque estuvo cerrado y la situación no fue sencilla ¿Qué fue lo que se realizó?
– En el Jorge Newbery se rehizo toda la pista – 2100 metros – algo que no se había hecho en más de 40 años. Se mejoró todo el señalamiento, se amplió el rodaje, al igual que el hall de pasajeros, la zona de preembarque del primer piso y la de comercios; y se reconfiguró la plataforma estacionamiento que ahora posee una capacidad para 31 aeronaves; se agregaron 260 nuevas posiciones de parking para vehículos y se instalaron dos modernas cintas de entrega de equipaje. Es un trabajo muy importante realizado en 28 días y con una inversión de 70 millones de pesos para todas las obras.
Cuando se cerró y tuvimos que trasladar todo el sistema de cabotaje a Ezeiza funcionó bien, pero los primeros días fueron complicados, no por efecto propio sino por ciertos problemas gremiales que debieron enfrentar las aerolíneas.
– Ezeiza parece ser un proyecto ambicioso.
-En este momento, es nuestra obra principal y se prevé un incremento en la cifra de pasajeros de acá al 2014 de un 20% con respecto a este año.
En todos los aeropuertos ocurre lo mismo como, por ejemplo, en el de Córdoba, que es uno de los lugares de mayor movimiento de plazas de todo el país después de Ezeiza y Aeroparque.
Cuando se realizó la planta baja para trasladar allí la central de cabotaje con el fin de renovar Aeroparque, se invirtieron 300 millones de pesos. Esa obra se sigue ampliando y en julio será inaugurada. Hasta allí llegamos a 580 millones de pesos y para mediados de 2013 va a estar listo todo el nuevo Ezeiza, que implicará una inversión total de 950 millones.
El aeropuerto tendrá la capacidad para atender a 13 millones de pasajeros y realizar 90 mil operaciones por año. Se construirán 186 mil metros cuadrados de plataforma, 21 pasarelas telescópicas, 4.800 cocheras y 200 puestos de check-in. Además, se podrán procesar 4.000 pasajeros en horas pico.
– ¿Qué es lo complicado a la hora de renovar o construir un aeropuerto?
-No hay ninguna problemática en especial. Tal vez haya una dificultad con el tiempo que se planifica para realizar las obras. Cerrar un aeropuerto es una cosa muy seria, y un ejemplo claro de ello es Aeroparque.
– Durante algunos feriados se puede ver como se desborda la capacidad a la hora de hacer el check-in, por ejemplo. ¿Qué se puede hacer al respecto?
– Uno puede tener la previsión de un crecimiento. Lógicamente, lo que no se puede tener es la anticipación de un imprevisto. Y en el caso de los feriados, no se puede construir un aeropuerto dos veces más grande porque dos veces por año pasa más gente.
– ¿Qué sucede cuando ocurre un problema con los vuelos?
– Cuando se acumulan los aviones sobrevienen dos problemas. Primero, el parking se llena de aviones porque los que tienen que salir no salen y los que llegan quedan estacionados.
De este modo, terminan quedando más de 50 naves en las plataformas. En segundo lugar, la gente que arriba de esos aviones se suma a las personas que están a la espera de los vuelos demorados y se produce una aglomeración.
No siempre los pasajeros comprenden que no es nuestra responsabilidad.
– ¿Cómo se controlan las normas de calidad?
– Se realizó la certificación bajo las normas IS09001, que se deben cumplir tanto en el proceso operativo (los aeropuertos) como en el administrativo.
Todas las gerencias lo poseen.
Por medio del sistema de calidad se establecen las pautas de trabajo, se chequean los manuales, se genera el compromiso con las otras áreas relacionadas con los sectores certificados y se observa cómo se puede mejorar.
– ¿Y qué sucede con la seguridad?
– Las normas de seguridad las dicta la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI). Ellas establecen las pautas generales que se deben seguir y cumplir, entre ellas la extensión de pista, las calles de rodaje y los alambrados perimetrales.
Nosotros estamos regulados por el Organismo Regulador del Sistema Nacional Aeropuertos (ORSNA), que debe cumplir los dictámenes de la OACI, por lo cual ningún aeropuerto puede estar fuera de regla.
– ¿Qué depende y qué no de AA2000?
– El aeropuerto es una gran caja de servicios en la que funcionan distintos sectores, algunos de los cuales dependen de nuestra empresa, mientras que otros no.
Por ejemplo, las torres de control dependen de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), que tiene a su cargo el control aéreo.
Cada cual tiene su aérea de responsabilidad.
Si se atrasa un vuelo es responsabilidad de la línea aérea, y si hay un problema con la torre de control es de la ANAC. Nuestra responsabilidad es brindar servicios, en primer lugar, a los pasajeros tanto en la salida como en la entrada; en segundo lugar, a las líneas aéreas, para que tengan un lugar apropiado, los hangares correspondientes y todo lo que necesita el avión para estar en condiciones de operar; en tercer lugar y en el orden interno, lo que es seguridad y escaneo; y por último, ofrecer un lugar para migraciones en el caso de los vuelos internacionales y para las tasas.
– ¿Qué otro tipo de servicios brinda AA2000?
– Dentro del aeropuerto se brindan servicios comerciales y culturales.
Nosotros tenemos un programa de exposiciones de obras pictóricas y esculturas en los distintos aeropuertos dentro de la zona ‘Espacio Arte’. Otro de los servicios son los shoppings y los bares, aunque a veces se quejen de los precios.
– Parece que los aeropuertos dejaron de ser simplemente un lugar de paso.
– Son mucho más que un edificio, son un lugar donde parten y nacen sueños. El pasajero se va en busca de algo y hay gente que espera lo que vuelve. Es un sitio en el que hay emociones encontradas, y esos momentos deben ser acompañados con una estructura adecuada.
– ¿Cómo sería un aeropuerto ideal?
-Uno que fuese lo suficientemente ágil, que es lo que nosotros estamos logrando, para que no haya acumulación de público, ya que cuando esto ocurre las personas se ponen nerviosas y de mal humor.
Sin embrago, esto es imposible porque siempre puede ocurrir un imprevisto.
A pesar de ello, hay que tratar de que mientras el pasajero esté de paso por el aeropuerto se encuentre bien.
– Para concluir, ¿AA2000 debe crecer con el turismo?
– No va a haber alternativa. Si hoy recibimos 15 millones de pasajeros y en diez años aumenta a 24, inevitablemente vamos a tener que seguir ampliándolos porque la primera impresión la damos nosotros.
Se trata de una carrera contra nosotros mismos. Llegamos hasta acá, pero vamos a seguir avanzando. El tráfico de pasajeros va a seguir creciendo ya que la Argentina es un lugar codiciado para visitar. Ya se instaló en el exterior como un importante destino turístico. A esto se suma, además, que se han incorporado más países con poder adquisitivo para viajar y es mucha más la gente que se agregó al mercado de los viajes. Por eso, es necesario que las personas que deciden venir tengan una excelente primera impresión, que vean un aeropuerto espectacular. Esa primera impresión no se la borrarán nunca.
Ernesto Gutierrez Conte 